Skip to main content

El folleto Quiénes Somos y Qué Creemos es un gran recordatorio de nuestra identidad como la Iglesia Cristiana Reformada. Este folleto está disponible a través de Faith Alive y también se puede acceder a este a través de la Biblioteca Digital. Todos haríamos bien en leerlo una vez al año. Aquí está la razón.

Primero, nos hace recordar que nuestra identidad denominacional está, en su fundación, directamente dentro de la tradición del cristianismo ortodoxo: “Las enseñanzas de ICR tienen mucho en común con las creencias de los cristianos alrededor del mundo” (p. 13).

Aunque la persona que usted encuentra en el supermercado, o la que encuentra al otro lado del oceano tal vez no reconozca el nombre denominacional “Iglesia Cristiana Reformada en América del Norte”, usted puede encontrar puntos en común simplemente diciendo que su iglesia es parte de la iglesia cristiana alrededor del mundo.

Sin embargo, hay áreas únicas de énfasis dentro de la tradición Reformada que nos diferencia de otros tipos de cristianos. El folleto continúa explicando estos éfnasis como marcas de acento Reformado. Estos incluyen un enfoque en la soberanía de Dios, el pacto y el reino. Cada uno de estos me hace reflexionar.

Para los que conocen a autores y líderes Reformados, citar la afirmación de Abraham Kuyper de la soberanía de Dios sobre “cada pulgada cuadrada” es una frase simple y entendible. Me hace pensar en un tablero de ajedrez de pulgadas cuadradas—escuelas y tiendas, clínicas médicas y salas de juntas corporativas, playas y salones de baile; la lista continúa. Dios es soberano sobre todos ellos.

Con esto en mente, es fácil también sugerir que los cristianos Reformados son cristianos los siete días de la semana, no sólo los domingos. La vida cristiana siempre se persigue en todos los ámbitos—¡y Dios es soberano en todos ellos!

Una segunda marca de acento es el pacto. No sé usted, pero yo no oigo tantas referencias al pacto como solía hacerlo. Tal vez es porque referirse a escuelas cristianas “por pacto juvenil” parecía ser exclusiva (cuando en realidad, las escuelas cristianas fluyen directamente de la soberanía de Dios). Cualquiera sea la razón, nuestras referencias han disminuido, pero las promesas de Dios no.

Dios es un Dios que hace pactos. Nosotros vivimos dentro de sus promesas, y por lo tanto nosotros también debemos guardar promesas: instruir a los niños en el camino de Dios (Pr.22.6), amar a Dios sobre todo, y a nuestro prójimo como a nosotros mismos (Mat.22:37-39), y dar alegremente tal como hemos sido bendecidos (2 Co.9:7), por mencionar algunos.

Finalmente, nuestro acento Reformado pone un énfasis en el reino, dándonos responsabilidad para edificar el reino entre la venida de Cristo y su regreso. El folleto explica; “Jesús vino a inaugurar el reino de Dios. Su victoria sobre el pecado y la muerte cambió el curso. Aunque el pecado, quebrantamiento y la maldad aún son evidentes en el mundo, el reino de Dios ya está aquí y aún está por venir. Algún día Cristo vendrá otra vez, trayendo el reino a plenitud. Mientras tanto, oramos y actuamos para que venga el reino de Dios” (p.16).

Como resultado, nuestra denominación está activa en algunas actividades únicas para edificar el reino. Evitamos cualquier división entre lo sagrado y lo secular y más bien alentamos esfuerzos en “toda esfera de actividad humana: arte, medios de comunicación, publicaciones, leyes, educación, relaciones laborales, cuidado de ancianos, agricultura, negocios, justicia social y política. Ninguna área de la empresa humana está exenta”.

Aunque no siempre estamos de acuerdo sobre nuestras estrategias individuales y corporativas dirigidas al reino, sí estamos de acuerdo en que la participación de los cristianos en estas esferas es parte de nuestra identidad Reformada.

Una lectura anual de este folleto es un buen recordatorio que tenemos una identidad Reformada que nos hace parte de la iglesia de Cristo en todo el mundo y nos permite hablar con un acento decidido. Confiemos en nuestra identidad en Cristo y seamos claros al expresar lo que Dios nos pide.

We Are Counting on You

The Banner is more than a magazine; it’s a ministry that impacts lives and connects us all. Your gift helps provide this important denominational gathering space for every person and family in the CRC.

Give Now

X